Si tenemos que tener presente una palabra al hablar de dinero fiduciario sería la confianza. Antiguamente, el valor de los objetos o servicios venía siempre respaldado por metales preciosos, como es el caso del oro. Actualmente, este tipo de amparo ya no existe, siendo necesario contar con otro tipo de garantías. En Pujals Asessors hemos hecho este post para explicar qué es el dinero fiduciario.
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¿Qué es el dinero fiduciario?
Según lo define la RAE, lo fiduciario remite, como ya habíamos adelantado, a la confianza. Si ampliamos el término, el dinero fiduciario es aquel que no viene dado por una reserva que pueda darle respaldo. Contrariamente, la confianza que se tiene de este se la da el propio emisor de este tipo de dinero.
Recuerda que hablar de dinero en curso legal es referirse al patrimonio que permite tener unidades de valor, llevar cuentas y hacer pagos. La moneda o divisa sigue siendo la forma en la que manejamos normalmente ese dinero. En la actualidad se puede pensar en este como físico o virtual.
Sumado a esto, los billetes como tal carecen de cuantía, es decir, de valor intrínseco. Esto es bastante diferente a las monedas antiguas que se fabrican con el material que les daba valor. El oro y la plata para las monedas más valiosas, mientras que el cobre se usaba para las unidades menores.
Actualmente, el intercambio que se hace de objetos/servicios por billetes es posible debido a la confianza de quien emite dicha unidad. Es decir, es el banco central y gobierno de cada país el que otorga ese valor que es considerado como tal.
Todo esto, así como el reconocimiento del dinero fiduciario, es posible por la confianza que estas instituciones pueden darle. Esto, además de tener la certeza de que el dinero, en el valor que representa su diseño, será aceptado a cambio de esos bienes y servicios.
¿Dónde surge el dinero Fiat o fiduciario?
Recordemos nuevamente que el dinero llegó a presentarse como monedas elaboradas con materiales que les daban su valor. Con el avance de las civilizaciones, fue necesario cambiar a otro tipo de formas de contabilizar y dar valor al dinero.
Se sabe que el dinero fiduciario surgió aproximadamente en el Siglo XI en China. En occidente, en países como Holanda, se empezaron a emitir alrededor del Siglo XVII papeles que representaban esas monedas guardadas en el banco.
Pero, ¿por qué valían estos papeles? Justamente porque contaban con un respaldo en oro o plata del emisor del documento, y lo que este representaba, y no por el valor de este papel en sí.
Así, en el caso de compra o el pago de una deuda, esos bancos podían asegurar que la persona podía responder con esas reservas que poseían. Poco a poco, en el período de la II Guerra Mundial, se consideró el dólar americano como el valor de referencia para dar cuantía a esas reservas de metales preciosos. Con el tiempo, cada país fue migrando al resto de las monedas nacionales y divisas que conocemos hoy día.
¿Cómo se crea el dinero fiduciario?
Cuando pensamos en cómo se crea el dinero fiduciario, debemos entender que este es emitido y controlado por el estado, su banco central y los comerciantes. No obstante, también hay otros entes que influyen en esto, como pueden ser el propio Fondo Monetario Internacional o el Banco Central Europeo.
Todos estos organismos permiten hacer una gestión y control efectiva de este dinero. Sumado a esto, ofrece un respaldo que le da mayor valor y confianza cuando los usuarios (personas o empresas) van a usar y a ahorrar estas.
Básicamente, podríamos decir que el dinero fiduciario (dólares, euros, el yen japonés, y demás monedas del mundo) se genera, en cierta forma, de la nada. Es simplemente una autorización de impresión en un papel especial seriado y su registro en la data del banco/gobierno que la emite.
¿Para qué sirve el dinero fiduciario?
En términos simples el dinero fiduciario sirve para hacer todas las transacciones que el ser humano necesita hacer. Sin embargo, como su valor lo da el propio estado, este puede adquirir o perder valor a lo largo del tiempo. Sin duda, el poder adquisitivo que este otorga, y la misma manera de como se crea el dinero fiduciario, hace que disminuya su capacidad cambiante a lo largo del tiempo.
Algunos problemas relacionados con el dinero fiduciario
Una de las grandes deficiencias del dinero fiduciario, es que abre más la brecha entre ricos y pobres. En economía, se considera que los primeros en obtener dinero nuevo se benefician mucho más que aquellos que están mucho más abajo en la cadena de social/laboral.
Otro problema que está asociado al dinero fiduciario es que este puede llegar a fomentar burbujas especulativas. Esto se debe a que la abundancia de dinero atrae a todos (consumidores, empresas y bancos-) llegando a ocasionar endeudamientos que luego son difíciles de solventar dada la pérdida del valor de esa moneda.
Al ser tan sencillo de fabricar y conseguir, los gobiernos y empresas pueden pensar en gastar y comprar más. Esto, a la larga, puede llegar a afectar enormemente la economía y liquidez de un país, afectando el libre mercado, la producción y el sistema de ahorros.
¿Cómo se presenta el futuro del dinero fiduciario?
Puede decirse, sin temor a equivocarnos, que la mayor parte del dinero del mundo que actualmente no se encuentra en forma física. Este lo podemos localizar en forma de depósitos bancarios. Es, en resumidas cuentas, anotaciones contables que se transfieren, de una cuenta a otra, de manera digital o con el uso de tarjetas. Y, aunque el banco tiene la obligación de tener un porcentaje de ese dinero en material físico (billetes), nuestro dinero es básicamente un asiento bancario.
El futuro del dinero fiduciario puede parecer incierto al aparecer las criptomonedas, y otro tipo de monedas virtuales. Sin embargo, aún no está todo dicho en este material, ya que muchos países siguen teniendo una enorme reserva de metales preciosos, aunque no así el usuario común.
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